Al igual que en la película, pero bastante más joven, Kuzco es egocéntrico y malcriado y vive bajo el lema “soy el centro del mundo”.
Tal es así que cuando festeja su cumpleaños que hipotéticamente marca el momento en que debe convertirse en emperador, se lleva una gran sorpresa: para asumir el trono de su Imperio, ¡primero debe graduarse del colegio! Sin los beneficios reales, Kuzco deberá vivir con Pacha, su esposa Chicha y los niños Tipo, Chaca y Yupi. Pero adaptarse a la vida en el pueblo no va a ser tarea fácil y rendir las materias de la escuela tampoco. Con la ayuda de Malina, su nueva amiga, y sorteando los obstáculos que ponga en su camino Yzma disfrazada de la directora Amzy, Kuzco deberá hacer sus deberes, prestar atención en clase y no molestar a la maestra si quiere ser Emperador.
las nuevas locuras del emperador
